Cuidar Nuestras Finanzas Con Educación


Desde muy pequeños, en nuestros hogares, nos han inculcado buenos valores: trabajar por nuestros sueños, alcanzar nuestras metas, ser independientes, tener un título universitario y tal vez, ver fútbol los domingos; claro, cosas simples en la vida y que, en muchas ocasiones, vamos cumplimento y poniéndoles un “OK, realizado” a cada una de ellas, pertenecientes a un listado de cosas que debemos hacer a lo largo de la vida. Y así lo vamos logrando al pasar de los años: la escuela, donde nuestros padres nos dan el algo o la mesada; el colegio, cuando te pagan por una pseudoindependencia y por estudiar; y por último, donde creemos que hemos alcanzado el clímax de nuestra formación académica, la universidad: en ocasiones algunos cuentan con el apoyo de sus padres para costear su carrera, sus copias, sus pasajes y demás; en otros casos, hay quienes trabajan duro por llegar a cumplir dicha meta y graduarse.

Pero a lo largo de este ciclo se presentan circunstancias en las que el dinero no nos alcanza, se esfuma y nos queda faltando para determinadas acciones de nuestro diario vivir; es ahí, en ese preciso momento, cuando pensamos y reflexionamos: “se me acabó el dinero”, “no me alcanza”, “¿qué hice con mi sueldo?”, “necesito otro trabajo”; palabras que nos molestan por un tiempo y nos hacen pensar mil y una soluciones pero, al final, decidimos dejarlo todo para el próximo mes o hasta el próximo sueldo, cuando empezaremos a saldar nuestras deudas y creer que todo está bien; sin embargo, no es así puesto que quedaremos en la misma posición del mes anterior.

Esta situación es recurrente para muchas personas y solo nos preguntamos: “¿por qué nos pasa esto?”, “¿por qué el dinero no es suficiente para pagar carro, casa, comida, cine o un simple helado?”. Ahí es cuando debemos ser consecuentes y tener consciencia financiera, esto es, reflexionar frente al dinero que ganamos: ¿cómo lo estamos utilizando?, y en la escuela, el colegio o la universidad, ¿acaso faltó que nos hablaran un poco de educación financiera, de cómo aplicar esto a nuestras vidas?

¿Qué Es La Educación Financiera?

Cuando hablamos de educación financiera, aunque no sea un término muy conocido para la mayoría de las personas, nos referimos a algo necesario para el buen funcionamiento de las finanzas personales, puesto que esta educación se refiere a la capacidad que tienen las personas de aprender y entender cómo funciona el dinero en una economía. Desde ese planteamiento básico, podemos empezar a cambiar nuestra conducta en pro de los buenos resultado de nuestra vida financiera, haciéndonos responsables de las decisiones que tomamos al momento de invertir y no guardar dinero, o bien cuando requerimos pagar las deudas que tenemos en vez de buscar otras innecesarias, para ir creando así una cultura que beneficie a la economía personal a largo plazo.

Para logar un complemento en las finanzas personales, debemos ser conscientes de algunos elementos que forman parte de un todo, como por ejemplo:

Ingresos, que son esos activos que recibimos en compensación por nuestro esfuerzo y trabajo.

Gastos: compromisos adquiridos para solventar nuestros beneficios vitales como la alimentación, la vivienda, servicios de internet, transporte y demás.

Ahorro: es la parte de nuestros ingresos que no gastamos, sino que la organizamos y distribuimos de forma tal que nos ayude con nuestras finanzas.

Inversión: esta es la parte que decidimos no gastar y la ponemos a funcionar, ya sea en empresas o fondos de pensión, o también se puede, como en la mayoría de los casos, guardar en el banco.

Endeudamiento: es la última de esta lista, pero no la menos importante. Cuando estudiamos y analizamos bien nuestra capacidad de endeudamiento, ello nos permite acceder a créditos, préstamos, hipotecas y demás figuras que, a mediano y largo plazo, podrán llevarnos a la compra, venta y mejoramiento de nuestras finanzas personales.

Teniendo estos puntos claros, podremos empezar a desarrollar estrategias para la propia economía y no caer en las preguntas de cada mes -“¿qué hice con mi sueldo?”-, sino solidificarnos financieramente y tener una cultura financiera que nos brinde frutos y no dolores de cabeza.

Educación Financiera: En Todas Partes

En la actualidad, es importante tener presente el término educación financiera, adaptarlo a nuestras vidas y, más aún, darlo a conocer a los demás, de manera que todos tengan acceso a ella para generar una cultura financiera que sea estable para todos, ya que estamos en una época en la que las grandes y pequeñas empresas, así como las personas con una idea de negocio, empezarán a desarrollar estrategias para vender e invertir en productos, servicios y bienes, lo que generará un flujo en la economía general pero tendrá afectación sobre la economía de muchos. Parte de la labor de aprender y enseñar sobre lo financiero recae en todas las personas, en especial considerando que hoy en día la tecnología nos trae este tema al alcance de las manos.

En perspectiva, es importante que estemos informados y conocer cómo se mueve la economía de nuestro país, qué es la inflación, cómo está el dólar o el petróleo, o, para no ir tan lejos, qué deudas tengo, dónde puedo invertir y qué puedo ahorrar; todo estos para que nuestras finanzas se muevan bien y podamos darnos un mejor estilo de vida. Si bien en la escuela, colegio o universidad, no se habla mucho de finanzas -a no ser que cursemos carreras contables o administrativas-, es bueno tener conocimiento sobre la materia y replicar lo que aprendamos a los demás.



Buscar